Muchos dicen que en la vida hay que hacer tres cosas: plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo. Pues bien... nosotras tenemos que decir que vamos a añadir dos más: hacer pan (que ya lo hicimos) y hacer helado.
Así que hoy os traemos la receta y la manera, fácil y sencilla, de hacer un riquísimo helado en casa y ¡sin heladera!. Os aseguramos que disfrutaréis con los cinco sentidos mientras lo hacéis.
Si habéis probado alguna vez a hacer helado y no os ha salido probad con esta receta. Al añadirle nata en vez de leche hace que tenga más grasa y no se congele cristalizado. El alcohol también ayuda a ello, por eso le hemos puesto un poco de vodka. No tenéis excusa, sólo buscar unas cuantas horas.
¡Manos a la obra!
Para unos 2 litros de helado
300 gr de arándanos frescos
500 ml de nata líquida
500 ml leche evaporada
300 gr azúcar
6 yemas de huevo
2 cucharadas de vodka
1 vaina de vainilla
Zumo de medio limón
Primero lavamos los arándanos y los ponemos a macerar con el zumo del medio limón, las semillas de la vaina de la vainilla y las cucharadas de vodka. Para sacar las semillas de la vaina de vainilla solo tenéis que, con la punta del cuchillo, abrirla de lado a lado y raspar el interior.
Mientras ponemos a hervir en una cazuela la nata y la leche evaporada, moved de vez en cuando porque es muy fácil que se coja y se queme por el fondo.
Por otro lado ponemos las yemas de huevo y el azúcar en un bol y batimos hasta tener una crema suave y esponjosa.
Una vez la tengamos, vamos añadiendo, poco a poco, la nata y la leche evaporada calientes, sin dejar de remover, para que las yemas no se corten.
Sólo nos falta poner la mezcla de los arándanos en un vaso batidor, triturarlo e incorporarlo al bol de la crema anterior. Mezclamos bien para que se junten todos los ingredientes.
Llega la parte importante del helado, meterlo en el congelador. Debéis ponerlo en un recipiente un poco mayor para que a la hora de moverlo no se salga todo por fuera. Lo tapamos con un papel film por encima y lo dejamos un mínimo de 6 horas (nuestra recomendación es que lo preparéis a última hora de la tarde y así lo podéis dejar toda la noche enfriándose).
Cuando veáis que por las paredes se haya endurecido empieza el momento de 'golpearlo'. Y esto consiste en que, cada 30 minutos, debéis sacarlo del congelador y batirlo enérgicamente para evitar que se formen escamas de hielo y quede un helado totalmente cremoso. Este proceso tendréis que hacerlo durante 4 horas (si pasado este tiempo aún lo tenéis blando dejadlo en el congelador, sin batir, hasta que esté totalmente congelado).
Umm que rico!!besoss
ResponderEliminarSiii está demasiado rico jejeje la pena es que engorde... :( jejeje
EliminarUn beso!
Helado que bueno!!!
ResponderEliminarMe gustan todos los sabores pero este de arandanos tiene que estar de muerte.
No lo he probado nunca pero solo ver el color ya apetece.
Los que vivimos en la costa tenemos la brisa del mar,
pero me imagino este calor en el interior y este helado es ideal para tomarlo en una terracita de Madrid
Es un helado ideal para cualquier lugar :)
EliminarY está muy muy bueno!! Y el color es muy bonito. El conjunto lo hace el helado ideal!!
Un beso!!
Hola chicas!
ResponderEliminarViendo la receta y con el calor que hace ya de buena mañana, es lo que más nos apetece hacer!. Tengo todos los ingredientes....agggg! menos los arándanos frescos..(tengo unas bandejitas en el congelador, eso sí) y pregunto?...si son congelados?...afectará al resultado?...La lógica nos dice que no, pero igual demasiada agua al descongelarse macerando con el vodka y el limón? Lo pregunto antes de meterme en el "fregao".
Besos!
Nos encanta que vayas a probarlo!!
EliminarPensamos que deberías dejar descongelar los arándanos antes y quitarles todo el agua posible, porque así evitaras que se formen las incomodas escarchas de hielo.
Pero en el sabor no te va a afectar, seguro que te queda igual de bueno :)
Ya nos cuentas como te ha ido la experiencia y el resultado ;)
Ánimo y un besazo!!